Conquistadores desde las ciudades de Coro y Pamplona (página 2)

Ascendió por las márgenes del río Lebrija hasta los terrenos donde sus hombres fundaron el 27 de marzo de 1529 y construyeron un asentamiento de chozas que llamaron Cantabria. En este asentamiento dejó a la deriva parte de los hombres que se negaron a seguir acompañándolo en la expedición conquistadora. Les prometió volver a Coro y regresar con más fuerzas, municiones y expedicionarios.

Alfinger prosiguió su conquista hacia la región minera de Vetas. En la meseta de Caracoles, cerca a la Laguna de San Mateo en territorios actuales de Bucaramanga, existía el asentamiento Guane más numeroso de la región, con más de dos mil habitantes. El campamento de Cantabria de aquella época, construido en tierras no peligrosas y de clima favorable, se constituyó en el poblado que dio origen al municipio de Lebrija.

1531. Después de algunos días de recuperación, quienes decidieron continuar, encontraron y saquearon las ricas minas indígenas de Vetas y sus alrededores. Luego empezaron a bajar a climas más benignos, siguiendo los márgenes del río Pamplona. Los naturales abandonaban sus caseríos y huían, otros les atacaban por diferentes partes y les hostilizaban sin cesar. Al llegar a las vegas y llanuras fértiles de Chinácota, indígenas más denodados que los que habían encontrado hasta entonces, le hicieron una resistencia imponente. El baquiano Esteban Martín resultó levemente herido y Alfinger con una flecha envenenada en la garganta cayó moribundo al suelo. Murió al tercer día y lo enterraron en un vecino valle que conserva el nombre de Míster Ambrosio.

Hay quienes creen que fue muerto por sus propios compañeros, que estaban hartos de sangre y de injusticias, y ambiciosos de repartirse el considerable botín que habían saqueado. Solo algunos pocos expedicionarios continuaron su marcha de regreso a Venezuela. Después de haber nombrado Capitán y guía a Esteban Martín.

No es descabellada la hipótesis de que el origen de abundantes indios rubios en territorios santandereanos se deba a los tres grupos de alemanes españolizados que abandonaron la expedición conquistadora de Ambrosio Alfinger. El primer grupo con el tesoro saqueado a los indios del bajo Magdalena, antes de iniciar el ascenso hacia la región minera de Vetas. El segundo grupo de quienes decidieron no proseguir con Alfinger y asentarse en el rancherío de Cantabria. Y el tercer grupo el de aquellos que después de asesinar a Ambrosio Alfinger se repartieron el botín de oro saqueado en la región minera de Vetas y nunca regresaron a Coro Venezuela.

Pedro de Ursúa (1526-1561)

Nació en Baztán, Navarra, España.

1544. Llegó a Cartagena el visitador de la corona española Miguel Diez de Armendáriz a arreglar las rivalidades entre quesadistas y luguistas, que mantenían desorganizado el Nuevo Reino de Granada. De inmediato envió a su sobrino Pedro de Ursúa como gobernador a Santafé a arreglar los problemas, quien al pasar por Vélez y Tunja hizo reconocer su cargo de gobernador ante los corregidores. Reconocido también en Santafé como gobernador hizo encarcelar a Montalvo de Lugo y al capitán Lancheros, quienes lideraban a los luguistas.

El cacique guane Chianchón del Socorro, a quien Martín Galeano había logrado someter, se levantó de nuevo contra Gerónimo de Aguayo, al frente de tres mil indios. Estaban tan fortificados en sus montañas y defendían tan tenazmente su territorio que parecía imposible someterlos. Pedro de Ursúa un buen guerrero español que aún no había cumplido los veinte años, a la cabeza de ochenta infantes, veinte jinetes y una jauría de perros, atacó y venció a Chianchón entre los cerros escarpados del río Suárez. Fusiló a centenares de indígenas, decapitó a sus jefes, pacificó y aterró la provincia antes de su regreso a Santafé.

1549. Armendáris ante la información de un río de oro y ricas minas auríferas, envió a Pedro de Ursúa en una nueva expedición con ciento cuarenta soldados a conquistar el territorio de los chitareros y a fundar una ciudad, más hacia el oriente de la frustrada ciudad de Málaga. El sábado víspera de la fiesta de pentecostés la expedición llegó a un valle de clima frío y sano, resguardado por montañas, donde Pedro de Ursúa decidió fundar la ciudad de Pamplona, nombre de su ciudad natal en España.

Ursúa permaneció en la ciudad un año, dirigiendo la construcción de la iglesia, repartiendo solares y encomiendas entre los soldados españoles que lo acompañaban y explorando la región en busca de las minas de oro. Amante de las aventuras, sintió que desperdiciaba su juventud en aquellas empresas, dejó de gobernador a Ortún Velasco y regresó a Santafé a solicitar nuevas expediciones guerreras en las que pudiera conseguir victorias.

En el Perú durante una expedición para encontrar El Dorado
por el río Marañón fue asesinado por varios de sus acompañantes
expedicionarios junto con su amante Inés de Atienza.

Ortún Velasco

Asumió el liderazgo de la expedición y contrató expertos para buscar minas de oro. Al encontrarlas en 1551, aprovechó las poblaciones recién sometidas para explotarlas.

Cuando la zona fue ocupada por Pedro de Ursúa y Ortún Velasco
de Velázquez en 1549, redujeron a los primitivos pobladores al régimen
de encomiendas. Alrededor de 100 grupos o capitanejos fueron repartidos en 53
encomiendas por todo el territorio.

Juan Rodríguez Suárez

Juan Rodríguez Suárez (1510 –1661). Nació
en Mérida, Extremadura, España. Fue un explorador, conquistador
y fundador que actuó en Colombia y Venezuela.

Tuvo cinco hijos con Juana, una hermosa india de Tunja, con otras aborígenes
de la comarca fue padre de algunos mestizos más.

Militó en las huestes de los capitanes Suárez Rendón y
Pedro Ursúa. Mantuvo enemistad prolongada con el capitán Juan
Maldonado.

En 1554 fue nombrado regidor, en enero de 1558 elegido alcalde ordinario de
Pamplona, y en marzo del mismo año nominado por el Cabildo para ir a
buscar minas con 57 hombres, pertrechados de caballos, armas y alimentos.

Desde los llanos de Cúcuta pasaron al Realejo, Venezuela, donde en octubre
de 1558, fundaron el primer asiento de la ciudad de Mérida y nombraron
el Cabildo que regiría la nueva ciudad andina.

Por la fundación de esta ciudad sin las debidas autorizaciones fue enviado
a prisión de donde escapó a la ciudad de Trujillo en Venezuela.

Se unió al capitán mestizo Francisco Fajardo, quien ya había
fundado el poblado ganadero y minero de San Francisco en la costa cerca al pueblo
de El Collado, hoy conocido como Caraballeda.

El cacique Guaicaipuro, que comandaba las tribus de la región, al ver
las minas y el rancherío de San Francisco sin protección, una
noche atacó las instalaciones, incendiándolas y pasando a cuchillo
a todos los que se encontraban en ellas. Rodríguez Suárez regresó
con los hombres que lo acompañaban, acomodaron lo que estaba destruido
y, para imponer respeto a los indígenas, decidieron la creación
de una ciudad. En el mismo lugar Rodríguez Suárez refundó
la villa de San Francisco, repartió tierras y solares entre sus soldados
y nombró alcaldes y regidores. Así nacía el primitivo asiento
de Caracas, la futura capital venezolana.

En 1561, el rebelde Lope de Aguirre y sus soldados, habían desembarcado
en Borburata, y camino de Barquisimeto iban cometiendo asesinatos y tropelías.
Rodríguez Suárez salió al encuentro con algunos de sus
hombres, pero los indios que le seguían los pasos, los emboscaron y les
dieron muerte.

Juan Maldonado

Barco de Ávila, España 1525 – Pamplona, Colombia, 1572.

Monumento en San Cristóbal.

Fue un militar, conquistador y explorador español durante la época de la conquista en América del Sur.

Fundó la Villa de San Cristóbal el 31 de marzo de 1561,
capital del Estado Táchira en Venezuela. El nombre de San Cristóbal
en recuerdo de la parroquia de San Cristóbal en la ciudad de Salamanca
en España, donde de niño asistía a los oficios religiosos.
En 1559 trasladó la ciudad de Mérida (Venezuela) a su emplazamiento
actual, dándole el nombre de Santiago de los Caballeros de Mérida,
al unirla con la población de Santiago de los Caballeros.

Falleció en la ciudad de Nueva Pamplona del Nuevo Reino de Granada
en 1572. y según sus mandas testamentarias fue enterrado en una bóveda
de la Iglesia Mayor de dicha ciudad. Fue esposo de Doña María
Velázquez de Velasco y Montalvo, hija del Capitán Ortún
Velázquez de Velasco, co-fundador de Pamplona.

Francisco Fernández Contreras

Al lado de Ortún Velasco Velásquez y de Pedro Ursúa, aparece Fernández Contreras, también de la legendaria e histórica ciudad de Pamplona. Por su reconocido valor fue nombrado jefe de la expedición que vino a culminar con la fundación de Ocaña el 14 de diciembre de 1570.

El Real de Minas

Fue un distrito minero en donde las autoridades, además de ejercer las funciones de gobierno, judiciales, fiscales y militares, debían aplicar las medidas conducentes al incremento de la producción de metales. El alcalde o administrador del real de minas, con frecuencia, fue el mismo administrador o alcalde mayor de la provincia, ya que así podían obtener mayores ventajas económicas.

El alcalde o el administrador del real de minas podía adjudicar a cualquier vecino la propiedad de un terreno en el que hubiera descubierto una veta de metal, pero no debía permitir el acaparamiento de minas. El denunciante conservaba la propiedad sólo si la trabajaba, porque al interrumpir el laboreo por más de cuatro meses, la mina quedaba vacante y podía ser denunciada por otra persona. En la legislación española se establecía que el subsuelo y sus riquezas eran propiedad del rey, quien cedía el usufructo de las minas a cambio de la quinta parte del metal producido. Era, pues, obligación del alcalde vigilar que las minas estuvieran activas y se llevara el oro para pagar el impuesto del quinto real a alguna población donde hubiera una Caja Real.

El alcalde debía facilitar los alimentos necesarios para los peones y los animales de trabajo, el abasto de agua y de los instrumentos y materiales usados para extraer el oro, así como asegurar la contratación de peones mineros para el pesado y peligroso trabajo en las minas.

Los comerciantes abastecían a la comunidad minera con todos los productos de consumo necesario. Entre los comerciantes mayoristas casi siempre se contaba el alcalde mayor.

Fuentes

http://es.wikipedia.org/wiki

http://www.pedrocheenlared.com/pers/fco4.pdf http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx/sites/estados/libros/sinaloa/html/sec_42.html http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/historia/ilustre

http://www.lebrija-santander.gov.co/nuestromunicipio.shtml?apc=mIxx-1-&m=f#historia http://www.aporrea.org/actualidad/a60656.html

Autor:

Rafael Bolívar Grimaldos